DELIRIO. Jonás Gutiérrez festeja su gol, el segundo del Newcastle. (Reuter) |
Ni el campeón, Chelsea. Ni los 26 goles de Sergio Agüero, coronándose como goleador de la Premier League. Ni el nuevo tanto de la estrella Harry Kane. Ni el espectacular juego del sorprendente Leicester. Jonás Gutiérrez, él, sólo él, se debería robar todos los elogios, todas las fotos, todas las portadas de la última fecha de la Premier League. El argentino fue la figura para que Newcastle pueda evitar el descenso: una asistencia y un gol que permitió vencer a West Ham 2 a 0, para sacarse la camiseta y celebrar la vida.
Jonás no se disfrazó este domingo de héroe: el traje ya lo tiene incorporado. En el 2013, al ex-Vélez le detectaron un tumor en un testículo. Quiso pelear. Afrontó quimioterapias. Pudo ganar. Pudo volver a jugar al fútbol: 333 días tuvo que esperar. Y lo consiguió. Su vuelta fue ante Manchester United, recibiendo una ovación de todos los espectadores que se levantaron del asiento para aplaudirlo de pie.
En la última fecha del fútbol inglés, Newcastle, que contó también con Fabricio Coloccini entre los titulares, tenía que ganar para mantener la categoría (descendieron QPR, Burnley y Hull City). Y el aporte de Gutiérrez terminó siendo clave: centro para que la cabeza de Sissoko abra la cuenta a los 9 minutos del segundo tiempo, cuando los nervios dominaban el escenario, y remate desde afuera del área, a cinco minutos del final, para que el balón toque la red y reine la tranquilidad.
Publicar un comentario