Si la foto te parece un montaje, mira el video de abajo y sácate las dudas.
El Gran Premio de Canadá de la Fórmula Uno sufrió una demora de casi tres horas por la lluvia. Pero además, una vez que el tiempo dejó de castigar a Montreal, el Safety Car se encargó de demorar aún más el relanzamiento lo que hizo de la carrera una prueba interminable.
En medio de esa espera, los bólidos giraron y giraron esperando que se diera la señal de salida (algo que ocurriría cuando la pista se secara un poco).
En medio del caos, Nick Heidfeld sufrió el desprendimiento de su alerón delantero y uno de los comisarios entrá a tratar de limpiar la pista. Pero se tropezó... y cayó en medio de la pista... Y uno de los Williams casi se lo "come". No lo pisó de casualidad.

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