La selección de Suiza se mostró como un áspero equipo ante Italia en el Estadio de Ginebra, donde consiguió el empate 1-1 frente a los hombres de Marcelo Lippi. Además, tuvo una gran ocasión para ganar con un disparo lejano de Shaquiri en los instantes finales.
Gohkan Inler abrió el marcador a los diez minutos. Combinó con N'Kofu y el arquero, Marchetti, no pudo hacer nada para detener el golpeo con la derecha del suizo. Sin embargo, Fabio Quagliarella de cabeza, amargó el festejo que sólo duró cinco minutos.
Cossu y Maggio disputaron un buen primer tiempo. Fueron los más sólidos del equipo dirigido por Marcelo Lippi en ese período. No obstante, el técnico italiano dejó a Cossu en el banco para que ingrese Pepe al inicio del segundo tramo.
Allí, ambos técnicos movieron sus respectivos sustitutos para hacer distintas pruebas, lo que afectó al ritmo del choque, en el que destacaron por parte italiana Gatusso y Zambrotta dentro del tono ascendente de toda la escuadra "Azzurra"
Aún así, Suiza dispuso de una gran oportunidad para llevarse la victoria en un último disparo de larga distancia, obra de Shaquiri que acababa de entrar en el campo por Fernandes, y que obligó al arquero Marchetti a despejar con los puños un balón envenenado.
La selección italiana arranca en el Mundial dentro del Grupo F junto a Paraguay, Nueva Zelanda y Eslovaquia; en tanto que Suiza comparte el Grupo H con España, Honduras y Chile.
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